Un post desató una crisis de comunicación para el Gobierno de Guatemala.
Por: Annelise Blanco
En la comunicación gubernamental es importante contar con una estrategia efectiva, equipo y tecnología apropiada, pero también con el personal adecuado para ejecutar las diferentes acciones o tácticas con las que se espera alcanzar los objetivos planteados.
Como es usual, dentro del staff de comunicación presidencial, es indispensable el apoyo de uno o más fotógrafos, que en la mayoría de los casos, suelen ser personas con mucha experiencia y profesionalismo para retratar y darle cobertura a una de las figuras más importantes del país.
Recientemente uno de los fotógrafos de la Secretaría de Comunicación Social de la Presidencia, de aproximadamente 22 años de edad y que llevaba tan solo tres meses de laborar en esa institución, viajó a Cartagena, Colombia, para darle cobertura a la VI Cumbre de las Américas. A raíz de ese viaje, el fotógrafo publicó en su cuenta personal de Facebook lo siguiente:
- “De haber sabido que no me iban a revisar en el aeropuerto por ser del gobierno, hubiera traído drogas, armas y todo eso :(”.
El escándalo por ese comentario no se hizo esperar, las críticas hacia el colaborador de esa secretaría trascendieron de Facebook hacia otros espacios como Twitter y medios de comunicación tradicional. De inmediato, me puse en contacto con uno de los funcionarios de dicha secretaría para confirmar si en realidad esa persona laboraba para ellos y de ser cierto, qué harían al respecto. A lo que Óscar Ismatul, subsecretario de la mencionada entidad, me confirmó que efectivamente el fotógrafo formaba parte del equipo de trabajo de la institución, pero que seguramente no continuaría laborando para la misma, debido a lo sucedido.
Personalmente me costó entender cómo un trabajador tan cercano al mandatario y al secretario de Comunicación Social de la Presidencia, publicara un comentario como ese, aventurando no solo su reputación personal y empleo, sino poniendo en duda el actuar y las políticas del recién elegido gobierno.
Esta no es la primera ni será la última vez que una situación como esa se de en el sector gubernamental o en cualquier empresa, por tal razón, es necesario que el responsable de dirigir la comunicación de una institución o corporación, sea una persona apta para seleccionar a su equipo de trabajo, tomando en cuenta la capacidad, integridad, compromiso y profesionalismo que se requiere, principalmente en el área gubernamental, donde se comente el error de contratar a personas con las que se simpatiza y confía demasiado o se tiene cierta amistad, dejando a un lado las características que anteriormente se mencionaron.
Desde hace muchos años los directores o gerentes del área de comunicación social vienen generando manuales con lineamientos de conducta y políticas para comunicarse mejor, de acuerdo a los requerimientos de cada institución. Ese tipo de documentos, de alguna manera, permiten trasladar a los colaboradores, gerentes y directores, la visión de la organización, normas de conducta dentro de la empresa e incluso, recomendaciones puntuales sobre líneas de comunicación a lo interno y externo.
Ahora con el auge que han cobrado las Redes Sociales y el Internet, es importante que esos manuales se sigan produciendo y que además incluyan recomendaciones generales para la comunicación que se genera en los medios digitales, ya que no todos cuentan con el mismo nivel de conocimiento y experiencia en el manejo de sus cuentas personales, y de esa manera, también se pueden prevenir situaciones incómodas que generen una crisis en las instancias, como sucedió en dicha Secretaría.
“Sentido común, el filtro poderoso”
Recientemente entrevisté a Sakis González, autor del libro Exposición Social, y al consultarle sobre qué recomendaciones daría para usar en cada una de las publicaciones que se realizan en las redes sociales, me contestó que siempre sugiere usar un filtro poderoso llamado “sentido común”. Personalmente, también considero que el sentido común es una de las herramientas más importantes al momento de tener presencia en ese tipo de medios, ya que tal y como lo mencionó Sakis en la entrevista “al ingresar a las redes sociales, hemos adquirido un compromiso con nosotros mismos y estamos en una exposición permanente, aunque no estemos presentes de manera física, en la web siempre existirá alguna referencia nuestra”. Expresó, el entrevistado.
En resumen, cada uno construye su propia marca, reputación y nombre que, con la ayuda del tiempo, lo harán diferenciarse del resto de personas, ya sea de manera positiva o en el peor de los casos negativa. Por eso, es importante recordar que si se logra una conducta prudente en la vida, se sabrá qué decir y cómo expresarlo, de igual manera, el momento y el medio adecuado para hacerlo, como decía mi bisabuelita, de la sabiduría nace la discreción.